"Cada vez viene menos gente a la fiesta porque van muriendo y los jóvenes están fuera"
19-03-2013 23:00
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Amparo Colmeiro, en la cocina de su domicilio, ayer, con unas rosquillas recién hechas. // Bernabé/J. Lalín
ÁNGEL GRAÑA - SILLEDA
La rosquilla volverá a ser la gran protagonista en la parroquia silledense de Abades el Domingo de Resurrección, el próximo 31 de marzo. Organizada por la Asociación de Veciños A Costa, la 27ª Festa da Rosquilla tendrá un año más un taller gastronómico de elaboración de estos sabrosos dulces, que tendrá lugar mañana y el viernes, a partir de las 16:00 horas en el local social. El viernes 22, a 20:00 horas, habrá una degustación que servirá de presentación de la romería, que este año contará con la presencia de la Banda de Música Municipal de Silleda y con el Coro de Ponteledesma, que participará en la tradicional misa solemne en el templo parroquial. Amparo Colmeiro es una veterana rosquillera de Abades que defiende a capa y espada la fiesta.
-¿Desde cuándo participa y colabora con la Festa da Rosquilla de su parroquia?
-Si no recuerdo mal, estuve en casi todos los 27 años que se lleva celebrando. Es algo muy nuestro y todos en la familia estuvimos siempre muy vinculados a una fiesta a la que, desgraciadamente, cada año viene menos gente. Espero que pronto puedan acercarse más público a esta romería porque es muy bonita y, además, te puedes llevar las que para mí son las mejores rosquillas que hay.
-¿Cuál es el secreto para que las rosquillas de Abades, como dice usted, sean las mejores?
-Sin duda, la buena materia prima con la que están hechas. Date cuenta que aquí, en Abades, hacemos las rosquillas con huevos de gallinas de casa, harina, mantequilla, levadura y, por supuesto, azúcar.
-¿Y la masa?
-Por supuesto. La masa hay que trabajarla mucho para que las rosquillas acaben siendo tan ricas como las que hacemos en Abades. En este tipo de postres es fundamental trabajar bien la masa para que las rosquillas salgan cómo deben. Después, hay gente que le gustan con más o menos azúcar, pero eso ya es cosa de cada uno. En Abades le ponemos mucho mimo a lo de hacer la masa porque es lo principal para que estén buenas.
-¿Recuerda cómo empezó a celebrarse la Festa da Rosquilla? ¿De quién fue la idea de ponerla en marcha en la parroquia?
-Esto viene de una mujer llamada Pura, que vivía en la parroquia, cuando yo era más joven. Entonces no había fiesta ni nada parecido, y ella andaba con la cesta a la espalda repartiendo las rosquillas por todas partes. Creo recordar que se llamaba Pura. Ella fue la primera que pensó que había que hacer algo para que las rosquillas de Abades fueran conocidas por todo el mundo.
-Sin embargo, usted misma reconoce que cada vez hay menos gente, ¿por qué?
-Porque es ley de vida. Falta gente porque se van muriendo. Además, los jóvenes que había antes en la parroquia ya no están aquí porque o se fueron a estudiar o a trabajar fuera. Yo soy optimista y pienso que si seguimos así la fiesta puede ir a más. Sería una pena que desapareciera por falta de gente porque las rosquillas de Abades se merecen que la fiesta siga otros 27 años más, por lo menos.
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