04 de febrero de 2013
Las máscaras de Merza reunieron ayer por la tarde a numeroso público. El buen tiempo animó a que tanto el respaldo como la participación fuese mayor que la del pasado año.
Cuatro parejas de Xenerais recorrieron la parroquia con sus vivas, hasta llegar al acto central ya por la tarde. Junto a ellos, el centinela, el correo y el abanderado. Este último fue un niño de 5 años, Enzo, que se estrenaba. Alba volvía a ser la «xenerala» más joven. Tampoco faltaron cuatro parejas de moros, el escribano y el frade. Los Xenerais repasaron la actualidad con temas como el empleo, la fusión de las cajas, las prejubilaciones o promesas electorales. Entre sus versos, «ya no nos preocupa, nos tienen acostumbrados, estamos en cabeza con seis millones de parados» o referente a la fusión «fue un escándalo brutal, hubo cuantiosas prejubilaciones, no de unos céntimos sino de varios millones». También hubo repaso a temas locales como la desaparición de la publicidad electoral de todos los partidos o el criadero de gallos. No se libró ni el párroco.
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