La silledense Margarita Campos Espiño ha sido galardonada con el tercer premio
del certamen a la excelencia musical que promueven la Fundación Paideia, la
Xunta de Galicia y el prestigioso estudio de grabación coruñés Mans. El objetivo
de estos premios es "el reconocimiento del esfuerzo de los estudiantes de los
conservatorios de música de Galicia, además de servir como proyección para los
jóvenes talentos gallegos", según explicaba esta misma semana Rosalía Mera,
presidenta de Paideia. La joven instrumentista de Trasdeza acudió a las
audiciones coruñesas para mostrar sus habilidades con la flauta travesera, el
instrumento que domina.
-¿Cómo resultó el proceso de selección en un certamen de esta categoría?
-Se trata de un concurso entre los alumnos que, como mínimo, consiguen sobresaliente al término de sus estudios en los dos únicos conservatorios superiores de Galicia, los de Vigo y A Coruña. Yo, como terminé con matrícula de honor, fui una de las elegidas y tuve que ir el martes y el miércoles a A Coruña para realizar las audiciones. Al final, concedieron tres premios y dos menciones de honor entre la docena de aspirantes que creo que estábamos allí. El premio carece de dotación económica, pero te permite grabar un cedé sola o junto a un piano o una orquesta.
-¿Es el primer galardón que recibe como instrumentista?
-Sí, es el primero que me conceden desde que inicié mis estudios musicales, primero en Lalín y, después, en Vigo. Para mi supone el culmen a un trabajo de 14 años, que es el tiempo que llevo formándome como intérprete musical. Además, conseguir grabar un cedé en los tiempos que corren, y en música clásica, es todo un privilegio que debo de agradecer.
-Alterna su profesión en la docencia con su pasión musical, ¿le gustaría dedicarse por completo a la música o cree que podrá compaginar ambas dedicaciones profesionales?
-Me gustaría dedicarme a la flauta formando parte de alguna orquesta, pero tengo que decir que la cosa está muy difícil. Llevo tiempo intentándolo y es todo muy complicado porque no hay ni oposiciones convocadas ni, por lo tanto, plazas que cubrir en las formaciones musicales que a mi me interesan como especialista en flauta travesera. Lo cierto es que el mundo de las orquestas en Galicia está ahora muy complicado.
-¿Qué la hizo decidirse por la flauta travesera y no por el piano u otro instrumento a la hora de realizar sus estudios de música en Lalín y Vigo?
-Me decanté por la flauta travesera por su carácter dulce y expresivo. Siempre me gustó mucho, también, por su delicadeza. Es un instrumento extremadamente dulce, como te digo, y desde el primer momento me pareció el más atractivo. Por supuesto, también toco el piano, otro instrumento muy agradecido para cualquier músico, y la guitarra, que me sirve, sobre todo, para complementar mis clases con los niños. Todos ellos son interesantes para una persona que, como yo, lleva tantos años estudiando, y que seguiré haciéndolo porque en este mundo nunca dejas de aprender.
-Es evidente que su formación es clásica pero ¿cuáles son los estilos musicales que le gustan cuando abandona ese repertorio y se relaja?
-Me gustan casi todos los estilos musicales pero tengo que reconocer que me inclino más por la música clásica, supongo que por deformación profesional. Te puedo decir que en mi coche siempre suelo escuchar alguna pieza clásica; es algo que nunca falta. Lo que pasa es que, además de la clásica, tengo otras preferencias más contemporáneas como el rock o la música pop. Por ejemplo, soy una gran admiradora de toda la producción de los Beatles y, por supuesto, del líder de Queen, Freddie Mercury, que siempre me pareció un extraordinario cantante.
-¿Cómo resultó el proceso de selección en un certamen de esta categoría?
-Se trata de un concurso entre los alumnos que, como mínimo, consiguen sobresaliente al término de sus estudios en los dos únicos conservatorios superiores de Galicia, los de Vigo y A Coruña. Yo, como terminé con matrícula de honor, fui una de las elegidas y tuve que ir el martes y el miércoles a A Coruña para realizar las audiciones. Al final, concedieron tres premios y dos menciones de honor entre la docena de aspirantes que creo que estábamos allí. El premio carece de dotación económica, pero te permite grabar un cedé sola o junto a un piano o una orquesta.
-¿Es el primer galardón que recibe como instrumentista?
-Sí, es el primero que me conceden desde que inicié mis estudios musicales, primero en Lalín y, después, en Vigo. Para mi supone el culmen a un trabajo de 14 años, que es el tiempo que llevo formándome como intérprete musical. Además, conseguir grabar un cedé en los tiempos que corren, y en música clásica, es todo un privilegio que debo de agradecer.
-Alterna su profesión en la docencia con su pasión musical, ¿le gustaría dedicarse por completo a la música o cree que podrá compaginar ambas dedicaciones profesionales?
-Me gustaría dedicarme a la flauta formando parte de alguna orquesta, pero tengo que decir que la cosa está muy difícil. Llevo tiempo intentándolo y es todo muy complicado porque no hay ni oposiciones convocadas ni, por lo tanto, plazas que cubrir en las formaciones musicales que a mi me interesan como especialista en flauta travesera. Lo cierto es que el mundo de las orquestas en Galicia está ahora muy complicado.
-¿Qué la hizo decidirse por la flauta travesera y no por el piano u otro instrumento a la hora de realizar sus estudios de música en Lalín y Vigo?
-Me decanté por la flauta travesera por su carácter dulce y expresivo. Siempre me gustó mucho, también, por su delicadeza. Es un instrumento extremadamente dulce, como te digo, y desde el primer momento me pareció el más atractivo. Por supuesto, también toco el piano, otro instrumento muy agradecido para cualquier músico, y la guitarra, que me sirve, sobre todo, para complementar mis clases con los niños. Todos ellos son interesantes para una persona que, como yo, lleva tantos años estudiando, y que seguiré haciéndolo porque en este mundo nunca dejas de aprender.
-Es evidente que su formación es clásica pero ¿cuáles son los estilos musicales que le gustan cuando abandona ese repertorio y se relaja?
-Me gustan casi todos los estilos musicales pero tengo que reconocer que me inclino más por la música clásica, supongo que por deformación profesional. Te puedo decir que en mi coche siempre suelo escuchar alguna pieza clásica; es algo que nunca falta. Lo que pasa es que, además de la clásica, tengo otras preferencias más contemporáneas como el rock o la música pop. Por ejemplo, soy una gran admiradora de toda la producción de los Beatles y, por supuesto, del líder de Queen, Freddie Mercury, que siempre me pareció un extraordinario cantante.
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